La has observado una noche de verano cundo el cielo esta claro y despejado. Cundo se observan todas las estrellas, formando las distintas constelaciones. Con la luna en su completa plenitud, observando la tenue luz que proyecta. Transformando todo lo que toca, dándole un color platino pálido. Dando una tranquilidad incomparable.
Imagínate por un instante que observamos la luna y las estrellas sentados en la arena de la playa, con la brisa del mar salpicando y bañando nuestra piel. Sentados uno al lado del otro con las manos cogidas. Contemplando la espuma de las olas resaltada por el brillo de la luna. Conversando sin ningún tipo de preocupación. Acariciando tus mejillas con la yema de mis dedos. Sintiendo la intensa tranquilidad que aporta el vaivén de las olas azotándose contra las rocas posadas a la orilla del mar.
10/01/2009
Desperté a media noche con la sensación de que he escuchado tu voz y una tristeza me atrapa, al caer en la cuenta que estas lejos de mí.
Intento que mi corazón sea como la coraza de una tortuga y que mi alma ruja como un león.
Entraste sin llamara no te esperaba y el azar inocente como un niño travieso te puso en mi camino.
Se cruzo tu vida y la mía, como se cruzan dos carreteras para después volver a separarse. ¿Por qué se cruzan las vidas que se tocan y luego vuelven a separarse?. Son filones de suerte que se mezclan en un punto disolviéndose posteriormente.
En este momento me encuentro ante el abismo más pequeño que por el contrario es el mas difícil de salvar.
7/04/2009

YO SOY TU AMIGO FIEL..
YO SOY TU AMIGO FIEL..
CIERRA LOS OJOS Y REECUERDA BIEN,
PUES YO SOY TU AMIGO FIEL..
ES VERDAD .TUNTUNTUN...
PUES YO SOY TU AMIGO FIEL...
Esta es la única parte que nos acordamos, pero va con onda ...
valexxxx y camii

Bueno...hola soy Cami y estoy con Valex (como me gusta decirle) y les contamos a aquellas pocas personas que entran a este blog (que por suerte no se borro) jaja...que el 24 tenemos la fiesta, la joda para ser más precisa, de Marii...grax por invitarnos amigaaaaa...
Ojala que sea muy linda tu fiesta y que la pases muy bien ya que te lo mereces :)...
Cambiando de tema queriamos hablar de la foto, y queremos decir que en ninguna foto salimos bien, si estamos las dos juntas siempre salimos mal, no sabemos porque pero asi es la vida :p.
Bueno me despido, para ser más precisa...CHAU, "QUE TE VAYA BIEN EN LA VIDA..." (frase de Valex).
Y DEJA TU COMENTARIO...Y BUENA ONDA.
CAMI Y VALEXXX. =)
La media naranja...

Me llevaria en su mercedes car y me compraria el mundo entero si eso es lo que quiero,
Pero no,tu eres lo que yo elegi.
Estaba siempre "chic" y al tanto de la moda y los mas caros perfumes brotaban de su piel.
Jamas me faltaria nada de comer y me compraria el mundo entero si eso es lo que quiero.
Pero no...tu eres lo que yo elegi
5/23/2009

tus sentimientos me impulsan a vivir mejor,el mal tiempo ya no importa,
contigo es mejor,
cuando el silencio aprieta mis sentidos y no hay
escape, no hay salida,
te abrazo tomo tu mano,
para seguir caminando rumbo a lo desconocido con temor pero contigo...
asi es mejor, cada vez mas.
3/24/2009
Música en las venas

Música.
Le zumbaba en la cabeza. Le gritaba en el alma.
Amaba la música de esa ciudad.
No sólo tango y rocanrol.
Bombos y bocinas. Trenes y estribillos. Marchas y mendigos. El silencio de los vivos y el berrinche de los muertos.
Recordaba los días sin música.
Había llegado a Buenos Aires con un oficio, un fajo de billetes y un nombre. El oficio era una habilidad que había adquirido en la primaria y había afinado en la secundaria. Su madre siempre había dicho que era muy cuidadoso con los útiles, que siempre le duraban años y estaban impecables. Él nunca le había aclarado que esos útiles impecables y duraderos eran de compañeritos que nunca se habían explicado su pérdida. Cuando se cansó de que su padrastro lo golpeara, le robó el fajo de billetes y se fue del pueblo. Triunfaría en la ciudad. A fin de cuentas se llamaba Esteban, no Eustaquio como el idiota de su hermano.
Se pagó una pensión barata mientras exploraba el ambiente. Al principio se había sentido perdido. Estaba al borde de la desesperación, contando las últimas monedas, cuando empezó a oír la música.
La ciudad le hablaba.
Era pura magia, y sólo era cuestión de escuchar.
Cuando aprendió a escuchar, la ciudad empezó a tratarlo bien. Tuvo un par de buenos golpes, billeteras con fajos de dólares. Y la ciudad le siguió sonriendo. La música continuaba, y él adivinaba quiénes llevaban plata en el bolsillo y quiénes no. Dejó la pensión para alquilar un departamento modesto.
Cuando llegaba al departamento, era un chico tímido y bien educado que saludaba al portero y no creaba problemas con los vecinos. A veces él mismo se creía esa imagen, tanto que hasta pensó en buscarse un empleo decente. Pero su mundo era la calle, y esas ideas raras no le duraban mucho. ¿En qué empleo decente le habrían pagado por hacer lo que sabía? ¿En qué empleo decente lo habría guiado la música?
La música le había ayudado a afinar su arte. Sabía arrebatar, birlar, hurgar, extraer, cortar y correr. Algunos preferían el tren, el subte, el colectivo o los bancos. Él era experto en todos los rubros. Algunos preferían el centro, Retiro o Constitución. Él era baqueano en todas las zonas. En cinco años de profesión, había juntado ahorros y nunca lo habían prontuariado ni había irritado a la competencia. Era metódico y respetuoso.
Seguía recetas simples: trabajar solo, ser simpático con los pibes que trabajaban para otros, no tocar drogas y no pasarse de ambicioso.
Lo importante era seguir la música. Cuando descansaba en el departamento de Lugano, mirando el barrio por la ventana, sentía esa música en los nervios.
Era una música de bronca y muerte. Una música compuesta por mil sonidos que todos oían pero nadie escuchaba.
El gorgoteo de las alcantarillas tapadas en días de lluvia, el pedorreo de los colectivos, el tintineo de las monedas en las latas de los mendigos, el canto ronco de los vendedores que ofrecían baratijas en los trenes, el griterío de los juegos de video, los murmullos de los tórtolos en las plazas, el chirrido del óxido en las cañerías.
Odiaba la ciudad, pero amaba su música. Una cosa no iba sin la otra. Si hubiera querido la ciudad, habría sido como esos viejos aficionados al tango que evocaban una Reina del Plata de bulines y una Corrientes paradisíaca. Al odiarla, había comprendido sus exigencias, y había sabido escucharla.
Y la música lo había protegido.
La música era sangre en las venas, y nunca se coagulaba.
Amaba la música de esa ciudad.
No sólo tango y rocanrol.
Bombos y bocinas. Trenes y estribillos. Marchas y mendigos. El silencio de los vivos y el berrinche de los muertos.
Recordaba los días sin música.
Había llegado a Buenos Aires con un oficio, un fajo de billetes y un nombre. El oficio era una habilidad que había adquirido en la primaria y había afinado en la secundaria. Su madre siempre había dicho que era muy cuidadoso con los útiles, que siempre le duraban años y estaban impecables. Él nunca le había aclarado que esos útiles impecables y duraderos eran de compañeritos que nunca se habían explicado su pérdida. Cuando se cansó de que su padrastro lo golpeara, le robó el fajo de billetes y se fue del pueblo. Triunfaría en la ciudad. A fin de cuentas se llamaba Esteban, no Eustaquio como el idiota de su hermano.
Se pagó una pensión barata mientras exploraba el ambiente. Al principio se había sentido perdido. Estaba al borde de la desesperación, contando las últimas monedas, cuando empezó a oír la música.
La ciudad le hablaba.
Era pura magia, y sólo era cuestión de escuchar.
Cuando aprendió a escuchar, la ciudad empezó a tratarlo bien. Tuvo un par de buenos golpes, billeteras con fajos de dólares. Y la ciudad le siguió sonriendo. La música continuaba, y él adivinaba quiénes llevaban plata en el bolsillo y quiénes no. Dejó la pensión para alquilar un departamento modesto.
Cuando llegaba al departamento, era un chico tímido y bien educado que saludaba al portero y no creaba problemas con los vecinos. A veces él mismo se creía esa imagen, tanto que hasta pensó en buscarse un empleo decente. Pero su mundo era la calle, y esas ideas raras no le duraban mucho. ¿En qué empleo decente le habrían pagado por hacer lo que sabía? ¿En qué empleo decente lo habría guiado la música?
La música le había ayudado a afinar su arte. Sabía arrebatar, birlar, hurgar, extraer, cortar y correr. Algunos preferían el tren, el subte, el colectivo o los bancos. Él era experto en todos los rubros. Algunos preferían el centro, Retiro o Constitución. Él era baqueano en todas las zonas. En cinco años de profesión, había juntado ahorros y nunca lo habían prontuariado ni había irritado a la competencia. Era metódico y respetuoso.
Seguía recetas simples: trabajar solo, ser simpático con los pibes que trabajaban para otros, no tocar drogas y no pasarse de ambicioso.
Lo importante era seguir la música. Cuando descansaba en el departamento de Lugano, mirando el barrio por la ventana, sentía esa música en los nervios.
Era una música de bronca y muerte. Una música compuesta por mil sonidos que todos oían pero nadie escuchaba.
El gorgoteo de las alcantarillas tapadas en días de lluvia, el pedorreo de los colectivos, el tintineo de las monedas en las latas de los mendigos, el canto ronco de los vendedores que ofrecían baratijas en los trenes, el griterío de los juegos de video, los murmullos de los tórtolos en las plazas, el chirrido del óxido en las cañerías.
Odiaba la ciudad, pero amaba su música. Una cosa no iba sin la otra. Si hubiera querido la ciudad, habría sido como esos viejos aficionados al tango que evocaban una Reina del Plata de bulines y una Corrientes paradisíaca. Al odiarla, había comprendido sus exigencias, y había sabido escucharla.
Y la música lo había protegido.
La música era sangre en las venas, y nunca se coagulaba.
3/23/2009
Bueno, esta es una canción(no terminada)que la compuso la futura canta-autora Bachy(su nombre artistísco) que se titulo recien ya que ella nos paso el papel con la cancion sin poner el nombre, asi por lógica, nosotras la titulamos "No puedo decirte adiós".
Ahi va:
Lo único que see, es que no puedo decirte adiós
Porque al decirteloo, siento extraño el corazon.
Y cuando tus ojos, me dicen te quiero
Me pierdo en ellos (esto es como un sueño)
Que nunca quieroo despertar...
Porque esto es algo mágico, que nunca me ha pasado
Esto es nuevo en mi vida, siento extraño el corazón,
Porque esto es algo mágico...
Compuesta por Viviana Benitez (aaaa paráaa, quien era!)
La canción no esta terminada, puede ser que en algun futuro (muy lejano) Bachy va a hacer funcionar de nuevo esa cabeza y nos va a deleitar de nuevo con su canción, terminada obvio.
Ahi va:
Lo único que see, es que no puedo decirte adiós
Porque al decirteloo, siento extraño el corazon.
Y cuando tus ojos, me dicen te quiero
Me pierdo en ellos (esto es como un sueño)
Que nunca quieroo despertar...
Porque esto es algo mágico, que nunca me ha pasado
Esto es nuevo en mi vida, siento extraño el corazón,
Porque esto es algo mágico...
Compuesta por Viviana Benitez (aaaa paráaa, quien era!)
La canción no esta terminada, puede ser que en algun futuro (muy lejano) Bachy va a hacer funcionar de nuevo esa cabeza y nos va a deleitar de nuevo con su canción, terminada obvio.
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